martes, 20 de octubre de 2009

SATIRA

RAÚL, MORATINOS Y LA BRUJERÍA Por: Héctor Peraza Linares

Madrid, 21 de octubre de 2009

Moratinos: Compañero presidente, traigo una misión muy importante que me ha encargado Zapatero.

Raúl: Lo que sea, cuando sea, y pa’ lo que sea, señor Ministro. Claro está, siempre que no sea pa’ que libere a los trescientos presos políticos, pa’ que haga elecciones libres, o pa’ que respete aquí los Derechos Humanos.

Moratinos: Tranqui, tranqui, compañero presidente. Nada de eso, por supuesto, es lo que quiere mi presi. Zapatero lo que quiere es que usted me lleve a un brujo.

Raúl: ¿Pa’ qué carajo quiere eso Zapatero?

Moratinos: Para que, mediante alguna brujería, suban las intenciones de voto de los españoles al PARTIDO SOCIALISTA OBRERO ESPAÑOL. Debe saber que, en las últimas encuestas, el Partido Popular, a pesar de estar dirigido por el inepto de Mariano Rajoy, nos lleva casi diez puntos de ventaja.

Raúl: Eso es pan comío, señor ministro. Ahora mismo le resuelvo ese problema. Espere aquí un momento. En seguida regreso.

Raúl se ausenta durante unos veinte minutos. Al cabo de ese tiempo aparece todo vestido de blanco, acompañado de un chivo. Porta, además, una gallina prieta debajo del brazo izquierdo, un pañuelo rojo que le cuelga de uno de los bolsillos del pantalón, varios mazos de diferentes hierbas, un gran habano encendido, una botella de chispetrén, una docena de caracoles y un coco. Del cuello le cuelga un collar hecho con cascarones de huevos. Moratinos, al verlo, exclama asombrado:

Moratinos: ¡Compañero presidente! ¡No me lo puedo creer! ¿Además de presidente de Cuba y de Comandante en Jefe, es usted …?

Raúl: Así mismito es, señor ministro. ¡Soy el brujo de la Revolución!

Raúl se suena un largo trago de chispetrén, le da un chuponazo al tabaco, expulsa el humo por la boca, escupe en la calva de Moratinos, y le dice:

Raúl: ¡Ése es el gran secreto de nuestra Revolución Socialista Marxista-Leninista- Brujista!

Moratinos: (perplejo) ¿Es por eso que usted y su hermano, o viceversa, que su hermano y usted, se han podido mantener durante más de cincuenta años en el poder?

Raúl: ¡Sirilo! – le responde Raúl, que baila y canta a ritmo de guaguancó:

Soy el brujo

de la Revolución,

bebo orujo

y erupto tiburón.

Moratinos se contagia y comienza también a contorsionarse. Se tira por el suelo. Parece poseído por algún espíritu. Raúl le pasa la gallina prieta por el cuerpo y vocifera, mientras mata al chivo de una puñalada:

Raúl: ¡La sangre de este animal la ofrendo a ti, Satanás, padre querido, pa’ que me digas qué debe hacer el hermano Zapatero pa’ conseguir que los españoles quieran votarle más a él que al líder del PP!

A Moratinos le entran convulsiones. Los ojos se le cierran. Se da golpes en el pecho. Be be de la sangre del chivo. La gallina prieta pone un huevo prieto. El ministro canta a pleno pulmón:

Moratinos: ¡KI-KI-RI-KIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII!

Raúl escacha el huevo en la frente del ministro de Exteriores del Reino de España. Le corta la cabeza al chivo y también a la gallina prieta. Levanta en vilo a Moratinos. Para sacarlo del trance, le pega un puñetazo en la nariz. A continuación le ata al cuello las cabezas del chivo y de la gallina prieta, y le dice:

Raúl: ¡Siá, caray! ¡Misión cumplida, señor ministro! Envuelva estas hierbas, este coco, esta docena de caracoles, y las dos cabezas que cuelgan de su cuello, en este pañuelo rojo, y llévele todo eso a Zapatero.

El ministro envuelve las hierbas, el coco, los caracoles y la cabeza del chivo y la de la gallina prieta en el pañuelo rojo.

Moratinos: ¿Qué debe hacer mi presidente con esto?

Raúl: Dígale que meta ese “trabajo” en una olla, y lo cocine a fuego lento durante cincuenta horas. Cada hora de cocción le dará a su presidente un año en el poder.

Moratinos: (sonriente) ¿Cincuenta horas dándole candela a la olla, significarán cincuenta años de Zapatero como presidente de España?

Raúl: Así mismito es, señor ministro.

Moratinos: ¿Y cuánto nos cobrará usted por esta brujería, compañero presidente?

Raúl: La voluntad.

Moratinos le entrega a Raúl un cheque por 37 millones de euros…

miércoles, 23 de septiembre de 2009

SATIRA



CUBA YA NO ES LA MISMA
Por Héctor Peraza Linares


Es domingo 20 de septiembre de 2009. El concierto Paz Sin Fronteras, de Juanes, Bosé y comparsa se desarrolla con normalidad en la capital cubana.

Una negra nube cubre el cielo habanero y, concretamente, a la Plaza Cívica, espacio donde cientos de miles de cubanos, principalmente jóvenes, disfrutan del espectáculo. El cantante colombiano tiene el micrófono en la mano. Menciona, como de paso, la palabra libertad. En ese momento, en medio de la inmensa multitud, se oye una frase:

¡Viva Pánfilo!

Juanes, Bosé y compañía se quedan atónitos. No saben ni qué hacer ni qué decir. No han escuchado un ¡Viva Fidel! ni tampoco un ¡Viva Raúl! No. Han escuchado un ¡Viva Pánfilo! Juanes, desorientado y confuso, se pregunta:

- ¿Quién es Pánfilo?

Bosé, se rasca la cabeza, y se hace la misma pregunta:

- ¿Quién es Pánfilo?

Ni Juanes ni Bosé conocen ni han oído hablar del tal Pánfilo. Ambos cantantes se miran extrañados. Abajo, el público comienza a repetir la frase, que retumba hasta en las palmas que rodean el monumento a Martí:

¡Viva Pánfilo!

Ni el famoso colombiano ni el no menos conocido español son capaces de articular palabras. Se han quedado mudos y paralizados al ver la pasión con que el pueblo allí congregado lanza al aire, y al mundo, aquellas dos palabras:

¡Viva Pánfilo!

Inesperadamente, alguien del público sube a la tarima, le quita de las manos el micrófono a Juanes, que acaba de cantar su Camisa Negra, y grita:

- ¡Nosotros lo que tenemos es tremenda hambre, asere!

- ¡Ham-bre! ¡Ham-bre! ¡Ham-bre! – corea con fervor la multitud.

El joven que le ha arrancado al colombiano el micrófono de las manos, dice, a
pleno pulmón:

- ¡Asere, lo que quiere el pueblo es jama!

- ¡Ja-ma! ¡Ja-ma! ¡Ja-ma! – repite con enardecimiento el gentío.

- ¡Tenemos hambre de libertad y comida! ¡De comida y libertad! – expresa el joven, y los allí congregados le responden al unísono:

- ¡Ham-bre de co-mi-da!

- ¡Ham-bre de li-ber-tad!

En medio de aquella atronadora muchedumbre, se escuchan una tumbadora, un cencerro y una trompeta que inician una conga en la que todo el mundo, incluso Juanes, Bosé y los demás artistas, comienzan a bailar y a cantar:

¡Hambre de comida!

¡Hambre de libertad!

Queremos jama,

de comida y libertad.

¡Queremos jama!

¡Esa es la verdad!

El millón y pico de personas allí presentes, bailando al ritmo de la conga, encabezados por Juanes, Bosé y los demás artistas, comienzan a arrollar por las calles de la capital isleña.

De las casas salen hombres y mujeres, niños, enfermos, viejos, muchos en chancletas y otros sin zapatos, y, en primer lugar, opositores y periodistas independientes, que se suman a la comparsa. Enterados de lo sucedido, los cubanos del resto de las provincias y municipios se lanzan a las calles, y a las guardarrallas, entonando la misma tonadilla.

Pronto, antes de que las fuerzas represivas del régimen puedan reaccionar y organizar una batida contra los congueros y las congueras, los soldados, clases y oficiales del Ejército y del Ministerio del Interior abandonan sus unidades militares y se suman a las arrolladoras congas.

Dos días después, los once millones de cubanos están en las calles del país congueando, y repitiendo sin cesar, a ritmo de tumbadoras, cencerros y trompetas:

¡Hambre de comida!

¡Hambre de libertad!

Queremos jama,

de comida y libertad.

Queremos jama.

¡Esa es la verdad!

Cuba se colapsa. Nadie trabaja. A Fidel y a Raúl no les queda otro remedio que huir de Cuba y marcharse hacia la República Popular China, que les da asilo.

Cae el comunismo en la isla.

Juanes, en una conferencia de prensa, canta:

Tengo la camisa negra
porque negra tengo el alma
jama jama jaman baby
¡Vivan Pánfilo y la jama!

Bosé, en dicha conferencia, emocionado, manifesta:

- ¡Cuba ya no es la misma!








lunes, 21 de septiembre de 2009

SATIRA


Cuadro de " LOS BORRACHOS DE VELAZQUEZ"

¡VIVA EL PANFILISMO!

Autor: Héctor Peraza Linares
hector.peraza.linares@hotmail.com
Madrid, 20 de septiembre de 2009.


El siglo XVIII es conocido como el Siglo de las Luces.
En Cuba, la segunda mitad del siglo veinte, y la primera década del XXI, son conocidos como los Siglos de las Luces… apagadas).
Surgió el Panfilismo ¡Y se hizo la luz!

(Un descendiente del Caballero de París).


Una nueva doctrina etílico-artístico-filosófica recorre el mundo: el panfilismo, mezcla alcohólico-científica del impresionismo, el simbolismo, el modernismo, el positivismo, el cientifismo, el parlanchinismo, el curdismo, y el rompepechismo, también llamado chispetrenismo, gualfarinismo o matarratismo.

El filósofo alemán del siglo XIX, Arthur Schopenhauer, y el etílico cubano del 2009, Juan Carlos González Marcos, alias Pánfilo, tienen conceptos idénticos para definir la verdad. Ambos opinan, cada uno con su léxico particular, que el mundo visible es sólo apariencia, y únicamente adquiere relevancia cuando tomamos conciencia de que a través de él se expresa una, irrebatible, verdad.

Para el pensador alemán la realidad auténtica corresponde a un principio que denomina voluntad. Para el dipsómano habanero, la realidad auténtica corresponde a un principio que denomina jama, o lo que es igual, comida. “Lo que hace falta es jama, que estamos en candela, asere”, proclama el genial y alcoholimático Pánfilo.

No obstante, mientras Arthur Schopenhauer postula que el Hombre es capaz de controlar sus pasos por la vida si tiene la mente llena de ideas, Pánfilo, por su parte, asegura que el cubano no es capaz de controlar sus pasos por la vida porque tiene, desde hace cincuenta años, el estómago vacío.

Schopenhauer, ciñe su doctrina en la voluntad. Pánfilo, centra la suya en la jama.

Si profundizamos en ambos pensadores, llegamos a percatarnos de que entre las dos doctrinas hay un hilo conductor, pues no hay voluntad sin comida, ni tampoco comida sin voluntad. En Cuba se vertebran ambos criterios etílico-artístico-filosóficos, porque el régimen no le da al pueblo ni voluntad con comida ni comida con voluntad.

Entre las obras capitales del filósofo alemán, discípulo también de Aristóteles y de Spinosa, figura la titulada “Sobre la cuádruple raíz del principio de razón suficiente”, que le valió el título de Doctor por la universidad de Jena, situada en el centro-oeste de Alemania. Entre las obras capitales del beodo habanero, discípulo también del mofuco y el amansaguapo, figura la titulada “¡Hace falta comida, que hay tremenda hambre, asere!” que le valió, junto a otras obras monumentales de su autoría, ser condenado a dos años en el tanque o cárcel, no sabemos si ubicado en el centro, el sur, el norte, el este o el oeste de la capital cubana, por peligrosidad social predelictiva.

Si Alemania tiene en Schopenhauer a un pensador de cuyo talento se han nutrido Nietzsche, Freud, Thomas Mann, Proust, Bergson, y Jorge Luis Borges, entre otros, Cuba tiene en Pánfilo a un comunicador de cuyas verídicas, aunque curdas expresiones, se han nutrido, a través de internet, millones de internautas.

Existen, también, muchas similitudes entre Juan Carlos González Marcos y otro filósofo alemán: Immanuel Kant. Las enseñanzas de éste último se basan en el racionalismo. Las enseñanzas de Pánfilo se fundamentan en el jamaísmo. A la cimera obra kantiana: “Crítica de la razón pura”, el panfilismo opone esta joya etílico-filosófica: “¡Tremendo descaro con los viejos!”.

Cerca de la tumba de Kant se halla una placa con la siguiente inscripción: “Dos cosas colman el ánimo con una admiración y una veneración siempre renovadas y crecientes, cuanto más frecuente y continuadamente reflexionamos sobre ellas: el cielo estrellado sobre mí, y la ley moral dentro de mí”. El día que fallezca Pánfilo, junto a su tumba pondrán esta lápida: “Asere, dos cosas colman la paciencia siempre renovada del pueblo cubano, cuanto más frecuente y continuadamente riflexiono (como el Comandante) sobre ellas: la falta de jama que hay bajo el cielo cubano y sobre mí, y el picadillo de soya dentro de mí”.

En honor a la veracidad histórica, al contrario que Kant, que llevó una vida muy estricta y previsible, al extremo de que sus vecinos ponían los relojes en hora cuando daba sus paseos diarios por el parque de la ciudad donde residía, Pánfilo, lleva una vida que oscila entre la dipsomanía y la juma, al extremo de que los camarógrafos, cuando el fundador del Panfilismo estaba en libertad, ponían sus cámaras y micrófonos a funcionar tan pronto lo veían acercarse, zigzagueante, al parque Villalón, en el Vedado.

Es conocido históricamente que, en febrero de 1600, cuando los tribunales de la inquisición condenaron a Giordano Bruno a morir en la hoguera, éste dirigió a sus jueces la inmortal frase: “Tembláis más vosotros al anunciar esta sentencia que yo al recibirla”. En el pasado mes de agosto del actual año, al ser condenado a dos años de prisión por un tribunal revolucionario, dicen que Pánfilo le gritó al juez “Condenadme, no importa: ¡La jama me Absolverá!

Un periodista del New York Times, que recientemente entrevistara, en sus respectivas tumbas, a Giordano Bruno, Schopenhauer y a Kant, afirma que dichos filósofos, en solidaridad con su colega cubano, le piden a Raúl Castro que le dé inmediatamente la libertad. Según el periodista, en un comunicado conjunto, los inmortales pensadores le expresaron al sustituto del ex Comandante en Jefe: “Pánfilo y usted son hermanos, porque ambos son hijos del dios Baco”.

Informado de lo que acontece al alcoholístico idealista cubano, Galileo Galilei, ha vuelto a repetir, en el cuatrocientos aniversario de haber puesto en funcionamiento su trascendental telescopio, y en honor a la tragicómica petición de jama para el pueblo cubano hecha por el creador del Panfilismo, su tan conocida frase: “E pour, jamie, se muove” (Y sin embargo, la jama, se mueve).

En mi época juvenil, al igual que millones de cubanos, leí “Los Hombres de Panfilov”, del autor soviético Alexander Bek. Hoy pudiera escribirse una novela titulada: “Pánfilo, el Hombre del jamalov”.

Velásquez, el más grande de los pintores de todas las épocas, en la década del veinte del siglo XVII inmortalizó en su lienzo “Los Borrachos”, que desde 1819 se exhibe en el museo del Prado, en Madrid, a siete beodos de la calle, de rostros avejentados y desgastados, que rodean al dios Baco. El celebérrimo maestro del pincel, declaró al mencionado periodista del New York Times: “Pronto agregaré a mi famoso cuadro el avejentado y desgastado rostro de Pánfilo”.

Baco, que libera a los hombres de sus problemas mediante el vino, y que hace lo mismo con los cubanos mediante el chispetrén, desde el lienzo Los Borrachos alza su copa para brindar, y grita:

¡Viva el Panfilismo!

Asegura la filosofía popular que los niños, los locos y los borrachos siempre dicen la verdad.

miércoles, 9 de septiembre de 2009

SATIRA


TIA, TIO O EL ASERE DE MADRID

POR HECTOR PERAZA LINARES


Hace unos días, en el interior de un autobús de Madrid, mientras viajaba en dirección a mi casa, escuché está interesante, culta y muy representativa conversación entre dos jóvenes:

- ¡No, tía!

- ¡Sí, tío!

- Pero..., tía....

- Qué sí, tío.

- No te creo, tía.

- ¿Eres tonto, tío?

- No tía...ej que, tía...

- Ná tío. Es así, tío.

- Mira, tía, tía...

- ¡Qué sí, tío, tío!

- ¡No te pases tía, tía tía!

- ¿Qué te crees, tío, tío, tío?

- ¡Tía...!

- ¿Qué te pasa, tío?

- No me pasa ná, tía.

- Allá tú, tío.

- ¡Ej mu fuerte, tía!

- ¡Joer, tío, tío, tío! ¡Tienes un morro que te lo pisas, tío!

- Tía, no te creo, tía.

- ¡Tás tonto, tío!

- ¡Qué no pué ser, tía! ¡Qué no, tía!

- ¡Qué sí, tío! ¡No me toques las narices, tío!

- ¡Qué no, tía!

- Tío... ¡qué te suelto el rollo, tío!

- ¡Suéltalo, tía!

- ¡Qué a la tía la pillaron con un tío!

- ¿Con un tío, tía?

- ¡Con un tío, tío!

- ¿Quién te soltó el rollo, tía?

- ¡Javier, tú tío, tío!

- ¿Javier, mi tío, tía?

- Él mimito, tío.

- ¿Qué me dices, tía?

- ¡Eso, tío! ¡Qué a la tía, Javier, tu tío, que está con la tía de la tía, la pilló con un tío!

- Tía ¿A la tía de la tía, tía?

- No, tío. ¡A la tía, tío!

- Tía ¿a la tía de la tía, o a la tía, tía?

- ¡A la tía, tío! ¡A la tía, tío, tío!

- ¡Ah, tía! ¿Y cómo pilló Javier, mi tío, a la tía con un tío, tía?

- ¡Qué no te enteras, tío! Ej que la tía se lo dijo a la tía, tío.

- Tía, qué mestás machacando, tía. ¿Qué tía a qué tía, tía?

- ¡La tía de la tía que está con Paco, tu otro tío, se lo dijo a la tía de la tía que está con Javier, tu tío, tío!

- ¡Ej mu fuerte, tía! ¡Mu fuerte! ¡Mu fuerte! ¡Qué caradura la tía, tía! ¿Y podqué la tía que está con Paco, mi tío, tía, no se lo dijo a Javier, mi tío, tía?

- ¡Podque la tía de la tía que está con Paco, tu tío, también está con el tío que está con la tía y como la tía de la tía estaba celosa podque ese tío estaba con la tía, ella se lo dijo a Javier tu tío, pa que Javier, tu tío, tío, pillara a la tía con el tío, tío!

- ¡Joer, tía! No te entiendo, tía. ¿podqué la tía que está con Paco, mi tío, no le dijo a Paco, mi tío, que la tía estaba con ese tío, tía?

- ¡Qué te pilla el toro, tío! ¡Podque Paco, tu tío, sabe que la tía de la tía está con ese tío, tío!

- Tía ¿y Paco, mi tío, no sabía que la tía..., tía?

- No lo sabía, tío.

- ¿Y qué le dijo, tía, Paco, mi tío, a la tía de la tía, cuando se enteró, podque se tuvo que enterar, tía, de que ese tío también estaba con la tía, tía?

- Tío, Paco, tu tío ¡cogió un cabreo, tío! y le dijo a la tía de la tía, que no era moral que si ese tío estaba con la tía, que la tía de la tía también estuviera con ese tío, tío.

- Tía, tía ¡paco mi tío tiene un genio! ¿y qué le dijo a Paco, mi tío, la tía de la tía, tía?

- Que se lo diriía a la tía, tío.

- Tía ¿y qué le dijo la tía a la tía, tía?

- Que se lo diría a ese tío, tío.

- Tía ¿y qué le dijo ese tío a la tía, tía?

- Que se lo diría a Javier, tu tío, tío.

- Tía ¿y qué le dijo Javier, mi tío, a ese tío, tía?

- Que se lo diría a la tía de la tía, tío.

- Tía ¿y qué le dijo a Javier, mi tío, la tía que está con Paco, mi tío, tía.

- No, tío, no. No se lo dijo a la tía de la tía que está con Paco, tu tío, sino a la tía que está con el mimito Javier, tu tío, tío.

- Tía ¿y qué le dijo a Javier, mi tío, la tía de la tía que está con el mimito Javier, mi tío, tía?

- Que se lo diría a la tía de la tía que está con Paco, tu tío, tio.

- Tía ¿y qué le dijo la tía de la tía que está con Paco, mi tío, a la tía de la tía, tía?

- Que se lo diría a la tía de la tía que está con Javier, tu tío, tío.

- Tía ¿y qué le dijo Javier, mi tío, a la tía de la tía que está con el mimito Javier, mi tío, tía?

- ¡Mira tío, me has armado un rollo que ya yo no sé qué tío está con qué tía, ni que tía está con qué tío, tío!

- Tía, tía, aclárame una cosa, porfa ¿no es la tía la que está con el tío?

- Sí, tío, Sí, tío, tío, tío. tío, tíotío.

- ¡Ahora si te entiendo, tía, tía, tía, tía, tíatía! ¡Caro! ¡Ej la tía de la tía del tío de la tía la que está con mi tío, tía! ¡¡Qué fuerte, tía! ¡E fuerte, fuerte, fuerte! ¡Mu fuerte. tía!

- ¡Joer, tío! ¡Qué no te aclaras, tío! ¡Qué te pilla el toro, tío! ¿Quieres que te lo diga, tío, en tres palabras, tío?

- ¡Sí, tía, tía, tía!

- ¡Ej tu tío el que está con la tía!

- ¡Qué me cuentas tía! ¡Así que es el tío el que está con la tía!

- ¡Caro, tío!

- ¡Qué tío, tía!

- ¿Qué tío dices, tío?

- ¿Quién va a ser? ¡El tío, tía!

- ¿Qué tío, tío?

En ese punto de la conversación bajé del autobús.

Al llegar a mi casa me encontré que allí estaban, de visita, mis tres hermanas: Juana, Luisa y María. Juana, con sus dos niñas de ocho y nueve años de edad; Luisa, con sus tres niños de siete, nueve y diez años, y, María, con sus cuatro criaturas de seis, ocho, nueve y once años.
En mi hogar también se encontraban mis dos hermanos, Alfonso y Alejandro.
El primero con su mujer y los tres pequeñuelos de cinco, siete y ocho años, y, el segundo, con su esposa y sus tres maravillosas niñas de cuatro, cinco y siete años.

Al abrir la puerta de la casa y verme, mis quince sobrinos y sobrinas, que me adoran, se abalanzaron en tropel sobre mí, todos gritando una y otra vez:

-¡Tía, llegó tío, tía! ¡Tío!, ¡Tío!, Tío!

El psiquiatra, un tío trepado en un caballo de madera en un tiovivo, me recetó tres pastillas de tiamina en desayuno, almuerzo y comida durante tres meses, y que pasara unas vacaciones en el municipio Tías, en la isla de Lanzarote. Le respondí al médico:

Asere, necesito una tía que me haga compañía en Tías.

Héctor Peraza Linares / 24 de julio de 2005 (arreglos el 9 de septiembre de 2009).





viernes, 31 de julio de 2009

MI CURRICULUMIAMENSE



Autor (ex de Idelsa Pataki): 
 Héctor Peraza Linares

DOTES PERSONALES:



MI CURRICULUMIAMENSE

Nombre: Marcelo Héctor Peraza Linares. En Quivicán me dicen cucho y, a veces, pucho. En ese pueblo habanero también se me conoce como “el hijo de Migdalia”, “el hermano de Omar”, “el sobrino de bigotegato”, “el que vive frente a la casa de los Barrios”, “el tío de Mayra”, “el que siempre viaja en el camello leyendo algún libro”, el que hacía zapatillas de mujer”, “el merolico”, “el que más pisotones le da a las mujeres mientras baila”, etc.

Edad:

Nací en el último siglo del segundo milenio de la era cristiana (después que el Papa Juan Pablo II y antes que la primera guerra del golfo).

Profesión:

Vendedor (cuando niño) de los cucuruchos de maní que hacía Perico El Cojo en Quivicán. Por esa época también vendí tamales, tortillas de maíz, aguacates, plátanos y boniatos mientras voceaba por las calles quivicaneras, al tiempo que empujaba el pequeño carretón donde llevaba las mercancías: ‘Llevo tamales, tortillitas, aguacates, plátanos y boniatos frescos’ (En honor a la verdad histórica, y a causa de mi timidez infantil, nunca voceé, pero era lo que me decía mi padrastro que tenía que hacer). Con el paso de los años, a palos, como el médico de Molière, me hice humorista y periodista.

IDIOMAS:

l - Chino. Como que en mi pueblo había una pequeña colonia de chinos de Cantón, aprendí con ellos esa tan difícil y complicada lengua. A ese idioma soy capaz de traducir la más compleja de las frases, como por ejemplo: ‘La distinguida señora Francisca quiere comprar un radio, una badidora, dos cucharas y un pararrayos’, que en chino (traducción libre) se dice: ‘La honolable señola Flancicá quelé complá ladio, batidola, do cuchala y uno palalayó’.
2 - Japonés. Ejemplo: ‘Taaaa atakáááá la ratatatatááááááá y no diparááááááááááá’, que significa: ‘Se atascó la ametralladora y no dispara’.
3 - Domino a la perfección el latín. Ejemplo: ‘Curais quivicanius mujeris furnicari’, que no requiere de traducción y por eso no la hago.
4 - El lenguaje de los ñáñigos de Guanabacoa: ‘Tú tené píritu malo travesao. Cogé gallina prieta y chivo blanco y traé que yo va quitá ti píritu malo travesao’.
5 - La culta jerga de los barrios bajos de La Habana Vieja. Ejemplo: ‘Negue, te tiro el perol en forifai y el yerro en duque’, lo cual quiere decir: ‘Amigo mío, te vendo el carro en cuarenticinco mil y la pistola en dos mil (pesos)’.
6 – El gallego. Ejemplo: ‘La moza de la ribeiriña de la Coruña le lava los calcetiñes al paisaneiro de Pontevedra mientrais el paisaneiro de Pontevedra le toca la gaitiña”, que equivale a: ‘La joven de la ribera de la Coruña le lava los calcetines al amigo de Pontevedra mientras el amigo de Pontevedra le toca la gaita’.
7 - Recientemente permanecí cuarenta días en Miami y en ese tiempo logré dominar el spanglish. Ejemplo: (una cubana miamense le dice a otra, por teléfono) ‘Hoy me llegaron diez biles y Mario perdió el unemploimen. No tenemos cash ni crédito. Traéme alguna astilla pa’ bai sonsin en el mol. Necesito encontrar un partain qüiqli. Llámame pa’trá. Bai-bai mai moder’.
8 - Me he perfeccionado durante años en el léxico de los recién nacidos. Ejemplo: ‘Tata papa baliga’, con lo cual el bebito/a quiere decir: ‘Mamá-papá, estoy partío del hambre que tengo’.
9 - Aprendí francés en la Alianza Francesa de La Habana, institución que no se debe confundir con la alianza (el anillo de bodas) de la francesa de La Habana. Ejemplo: Una tarde coincido con un francés al pie de una empinada escalera en un edificio de ciento treinta plantas de Quivicán (alrededor de la edificación hay sembradas 130 matas de aguacate). Delante de nosotros subía una bella dama vestida con una falda corta y anchísima. Ambos miramos hacia arriba. El francés me mira picarescamente y exclama: ‘C’est la vie!’ Y yo le respondo con una sonrisa: ‘¡Yo también!’.

ESTUDIOS REALIZADOS:

1989 – Licenciado en artes pláticas (conversación, en especial, con damas y ron bacardí).

1990 – Licenciado en Geografía Femenina.

1991 – Laboratorista (preparo excelentes mojitos).

1992 –Diplomado en Sandalias de Mujer.

1993 – Experto en marketing como vendedor ambulante (merolico) en las calles de Marianao y en los campos de Pinar del Río.

1994 – Doctor Honoris Causa por las universidades de Pogolote y La Pata.

TITULOS:

Real Zapatero de La Catedral de La Habana.

Marqués del Cucurucho de Maní.

Premio Nobel Físico-Químico del camello, el timbirichi y el chicharrón de viento.

Primer Premio en el concurso de catadores de chispetrén y amanzaguapo.

Catedrático de Primer Grado en la UCPB (Universidad de Colas en Panaderías y Bodegas).

Máster en Bicicletas Chinas.

Presidente de Honor de la SPNOEGC (Sociedad Protectora de la No Extinción de los Gatos en Cuba).

Medalla al Mérito Investigativo, otorgada por sus majestades los reyes de España, por haber descubierto quien fue el español que inventó la mulata.

AFICIONES PERSONALES:

Me gustan los tamales que venden en el restaurante Versailles de la calle 8 de Miami.

En los 40 días que permanecí en Miami fui infiel oyente del programa de Guillermo Alvarez Guedes por la 92.3 de la FM.

Me encantaría que los Marlins ganen de nuevo en 2009 las Grandes Ligas, y estar en Miami para celebrarlo de nuevo con el dedo índice (y no el del medio) fuera de la ventanilla del carro de mi hermano Oliverio.

Sugiero al alcalde de Miami que rebautice al cayo Key Biscayne con el nombre de cayo Quivicán (le garantizaría centenares y quizás miles de votos de miamenses procedentes del sur de La Habana). La noticia llegaría a Cuba y en Quivicán causaría una gran conmoción. El tirano Fidel Castro acusaría a Miami de plagio, la ONU tendría que intervenir en el contencioso y, si Miami ganara la pelea, Quivicán sería el primer pueblo libre de Cuba.

Como que tengo ciudadanía cubano española me encantó Coral Gables, pero no vi ni a un solo gallego viviendo en ese aristocrático barrio. Me brindo voluntariamente para alojarme en ese reparto, con lo cual casi me convertiría en el embajador de España en Miami. Sugerencia que hago al presidente de España, José Luis Rodríguez Zapatero y al gobernador de La Florida.

Si me dan a escoger entre Hialeah, Kendall y La Pata me quedo con el Auditorio del Condado de Dade.

Cuando viva en Miami realizaré un bojeo por las costas de La Florida con el objetivo de encontrar la mítica Fuente de la Juventud que no llegó a localizar el español Juan Ponce de León en 1513. Cuando logre ese propósito, sobretodo entre las mujeres, me haré más famoso que si descubro el secreto de la CocaCola.

VIAJES REALIZADOS:

He recorrido Quivicán de Norte a Sur y de Este a Oeste.

Cientos de veces he visitado a Bejucal, Santiago de las Vegas, Boyeros, Calabazar, La Víbora, Lawton, Santos Suárez, La Habana Vieja, Caimito, Bauta, Punta Brava, San Nicolás de Bari, Güines, Aguacate, Santa Cruz del Norte, Puerta de Golpe, Boca de Galafre, La Coloma, las playas de Guanabo y Santa María del Mar, La Bodeguita del Medio y el Bidel de Paulina o Fuente Luminosa.

Viajé durante años por todos los barrios de Marianao, entre ellos, Los pocitos, La lisa, El Palmar, Pogolote y por ambas orillas del río Quibú.

Siete calles me han impresionado en mis viajes alrededor del mundo : la calle Real de la ciudad de Pinar del Río, la Quinta Avenida de Miramar, la calle Enramada de Santiago de Cuba, la Avenida 25 donde vive mi madre en Quivicán, la calle Alcaudón lugar de mi residencia en Madrid, la calle Ocho de Miami, y “la calle” que cogí en mi época de zapatero clandestino y de merolico en Cuba.

EXPERIENCIAS INTERESANTES:

Mi corta visita a Miami me permitió detectar la diferencia que existe entre la tortilla de patatas española y el congrí cubano. Hacía seis años que no tenía el placer de degustar éste último.

En España he visto muchas cosas que no existen en Cuba. Cito algunas: las grandes catedrales como la de Burgos y la de Toledo; los inmensos museos El Prado, Reina Sofía y el Thyssen-Bornemisza que cuentan con cuadros de El Greco, Boticelli, Picasso, Goya, Velázquez, Tiziano, Rembrandt; el cante jondo, las coplas, las sevillanas, el chotis, las jotas, el flamenco, la gaita y la pandereta; las corridas de toros o fiestas taurinas; las Cuevas de Altamira, la Costa Blanca y la Costa Brava, los puentes y calzadas romanos, los Picos de Europa, las sierras nevadas, el río Tajo, el Ebro y el Duero; las fallas pirotécnicas de Valencia, las paellas gigantes para miles de personas en los grandes festejos, las romerías y los caballos de pura raza española, las cofradías en las procesiones de Semana Santa, el Palacio Real, los viñedos y olivares, los manzanares, los robledales; la caballa, las anchoas y los mejillones; los trenes de alta velocidad (AVES), la pluralidad de partidos, las discusiones en el Congreso de los Diputados transmitidas en vivo por televisión, el yacimiento de Atapuerca, los vestigios celtíberos y Celtas, el acueducto romano de Segovia, las murallas de Ávila, los monasterios enclavados en montañas deshabitadas y poco accesibles, el Camino de Santiago, la Basílica del Monasterio de San Lorenzo de El Escorial, la Puerta de Alcalá, el Museo de las Ciencias y las Artes en Valencia, las plazas en las ciudades, la Cruz de Caravaca, el Cristo de Medinacelli, los miles de pueblos fantasmas (despoblados) a causa de las grandes emigraciones del campo a las ciudades, la playa La Concha, bañada por el mar Cantábrico, en San Sebastián; el País Vasco, el Real Madrid (mejor equipo de fútbol del mundo), y del cual soy forofo, la huerta murciana, el puerto de Cartagena por donde partiera Cristóbal Colón en uno de sus viajes y, por último, el papel higiénico.

Miami significa “agua grande” en el lenguaje de los primitivos habitantes de ese territorio de La Florida. En noviembre de este año disfruté de tres o cuatro grandes aguaceros que cayeron sobre dicha ciudad. De ahí saqué la conclusión de que el indio que tuvo semejante idea fue el primer poeta de los Estados Unidos de Norteamérica o, al menos, del estado de La Florida.

OBSERVACIONES:

Mis aspiraciones laborales son muy modestas. Aspiro a un trabajo de no menos de 2 millones de dólares semanales en part time y sin taxis, pero sí con algún transportation.

En los trabajos soy extremadamente puntal, al extremo de que cuando no llego, pito, me paso y sigo; y cuando pito, me paso y sigo, no llego, guardo el pito y viro pa’trá.

Como periodista, cuando entrevisto a una mujer, me hago siempre la idea de que entrevisto a un poema.

PUBLICACIONES:

¡Cómo hay guarapo en Miami! (por escribir).

Del “asere” al “men” (ensayo sociológico por escribir)

¡Llámame pa’trá! (por escribir).

¡Los biles me tienen loco! (por escribir).

¡Pero por qué filomeno si La Pata no hizo ná!! (por escribir).

La salsa de la cocina cubana y la de la mujer cubana (por escribir).

Del lechón asado del 24 de diciembre al pavo del Thanks Giving Day (por escribir).

El spanglish vernáculo (por escribir).

¡Miami sí aguanta más! (por escribir).

LA RUINA DE LA COCA-COLA


Autor: Héctor Peraza Linares
Madrid, 27 de julio de 2009
¿Está Obama dándole pita a los castros?
¿Están los castros comiéndose las carnadas de Obama?


Obama, e Hillary Clinton, conversan a orillas de una playa de Miami. El presidente de los Estados Unidos de América porta una larga caña de pescar. Del brazo derecho de la Secretaria de Estado cuelga una cubeta llena de diferentes carnadas. Situado entre dos árboles, un letrero que reza: ORILLA DE LA DEMOCRACIA.

Obama: Hillary, ¿qué otra carnada podemos echarle a los castros?

HC: Le hemos lanzado cuatro, y las cuatro se las han comido: la de las remesas y los viajes, la de admitirlos en la OEA, la semisuspensión de la Ley Helms-Burton, y la de las conversaciones migratorias.

Obama: Te faltó una.

HC: ¿Cuál, presidente?

Obama: Los entrenamientos conjuntos que ha realizado nuestro ejército con el de ellos.

HC: ¡Cierto, presidente! Tiene usted razón. Son cinco.

Obama: Pero necesito tirarles otra más gorda. Que les apetezca mucho. Una que les sea irresistible.

HC: ¿Acaso está usted pensando en el levantamiento del embargo?

Obama: No. Por supuesto que no. En todo caso, el tal levantamiento sería la penúltima carnada que les lanzaría.

HC: ¿En la eliminación de la Ley de Ajuste Cubano?

Obama: Tampoco. Esa, en el peor de los casos, sería la última.

HC: Presidente, con todos mis respetos, pero, si seguimos tirándoles carnadas, se las irán comiendo todas una por una, y llegará el momento en que no tendremos nada que ofrecerles.

Obama: (entorna los ojos y medita) Tienes razón, Secretaria. Me he dado cuenta de que los hermanitos son muy glotones y pícaros.

HC: Cierto. Pican, pero no muerden el anzuelo que los traería a la ORILLA DE LA DEMOCRACIA.

Obama: (con un magistral gesto de una de sus manos) Tenemos que engañarlos con algo que les haga morder el anzuelo.

HC: Se me ocurre que podríamos entregarles la obsoleta base naval de Guantánamo.

Obama: No. A ellos la base no les interesa para nada. Al contrario, mientras estemos allí, siempre tendrán un argumento que esgrimir contra nosotros en la ONU. Ha de ser algo más espectacular.

HC: ¿Y si les regalamos la Estatua de la Libertad para que la coloquen frente al Comité Central?

Obama: No, porque dirán que la Estatua de la Libertad es como el Caballo de Troya, y que dentro de ella se esconderán varias divisiones de nuestros rangers.

En ese momento la Secretaria de Estado recibe, en su celular, una llamada de Bill Clinton. Cuando termina de conversar con su esposo, le dice al presidente Obama:

HC: Dice Bill que, si él estuviera como jefe de la Casa Blanca, le propondría a los hermanitos que, en lugar de veinte mil, pasen a ser cinco millones y medio los cubanos a los que otorguemos, anualmente, visas a través del bombo. De esa forma, en dos años la isla se quedaría vacía, pues Cuba tiene once millones de habitantes.

Obama: (Mata una docena de avispas y una mosca que le estaban dando vueltas alrededor de la empuñadura de la caña de pescar) No. Eso significaría que dentro de los once millones estarían incluidos los hermanitos. ¡Y yo no los quiero aquí, porque serían capaces de tumbarme del caballo, y de robarme la presidencia de los Estados Unidos de Norteamérica!

HC: ¡Es verdad! ¡Bill, sigue siendo el romántico de siempre!

Obama: Secretaria, infórmeme si queda alguna carnada en la cubeta.

HC: Ni una presidente.

Obama: ¿Y si le damos a los hermanitos el secreto de la fórmula de la CocaCola? Con eso los dos se convertirían en mucho más multimillonarios de lo que ya son.

HC: ¡Es una genial idea, presi!

Obama: Seguro que, con tal carnada, morderán el anzuelo, porque verán la posibilidad de convertirse, ambos, en presidentes de la CocaCola.

Obama convence al Congreso de brindarles, a los castros, el secreto de la CocaCola, y de convertirlos en presidentes de la empresa emblemática de los Estados Unidos de Norteamérica. Acto seguido, el mandatario de la Casa Blanca, con la caña de pescar en sus manos, regresa a la ORILLA DE LA DEMOCRACIA, en compañía de Hillary Clinton que porta la cubeta.

Obama: Secretaria, estoy seguro de que, a cambio de la carnada que les ofrezco, los castros liberarán a los presos políticos, permitirán la existencia de partidos, convocarán a elecciones libres, abrirán las puertas a la libertad de prensa y a la libre empresa, y se retirarán a vivir del dinero que van a ganar como presidentes de la CocaCola.

Sin pensarlo dos veces, le ordena a la Secretaria de Estado:

Obama: ¡Entrégueme la carnada del secreto de la CocaCola que el Congreso ha depositado en la cubeta!

Hillary cumple la orden. El presidente lanza la carnada. Suelta cordel. Espera un rato. Al cabo de unos minutos, ve que el corcho se hunde varias veces. Tira con fuerza. Saca el anzuelo. Descubre, decepcionado, que ¡los castros le han comido, una vez más, la carnada!

Obama: ¡Se la han comido, y no han mordido el anzuelo!

HC: ¿Es decir que, sin concederle ninguna libertad al pueblo cubano, los castros se han convertido en los nuevos presidentes de la CocaCola?

Obama: ¡Cierto! Lo peor para nuestro país es que Fidel Castro cambiará, por una de su invención, la fórmula de hacer el refresco más famoso del mundo. ¡Eso, lamentablemente, será la ruina, estimada Secretaria!

HC: ¿La ruina de nuestro país, querido presidente?

Obama: No. ¡La ruina de la CocaCola!










miércoles, 22 de julio de 2009

ANDY GARCÍA Y "EL TIRA-RANAS"


Autor: Héctor Peraza Linares

Andy García, el famoso actor de muchos éxitos cinematográficos de Hollywood como El Padrino, film magistralmente dirigido por Francis Ford Coppola y mejor actuado por Marlon Brando, y yo, tenemos tres identidades fundamentales: nacimos en el mismo pueblo: Bejucal, pequeña ciudad situada al sur de La Habana y del río Govea cuyo alámbrico cauce es más caudaloso que el del Obi-Irtish, el Yangtzé, el Mekong y el Yeniséi, los cuatro en el Asia, el Misissippi en norteamérica, el Nilo y el Congo, en el Africa y el Amazonas en Suramérica; somos de baja estatura, y a ambos nos gusta ver buenos partidos de béisbol.

Diferimos en una trilogía de cuestiones sin importancia: por ejemplo, él es famoso en el mundo entero. A mi ya ni me conocen en Quivicán ni en Santiago de las Vegas, pueblos habaneros en los que transcurrió mi niñez, adolescencia y parte de mi juventud y adultez; él, es millonario; yo, creo que tengo en el banco Banesto unos trescientos dólares, a lo sumo; todas las mujeres lo miran con deseo... A mi ninguna me mira ni con ni sin. Si alguna, equivocadamente, lo hace, más sin con que sin sin, en un pestañazo vira la cara hacia otro lado como si hubiese visto un fantasma, un gnomo, un clown o un clónico.

Además, el conocido actor desempeñó en la mencionada película el papel de Padrino de la mafia, mientras que a estas alturas de mi vida aún no tengo ni siquiera un ahijado, y jamás a ninguna pareja le ha apetecido que apadrine su boda, aunque debo reconocer, por gratitud, que Su Alteza Real, Felipe de Borbón, Príncipe de Asturias y la Princesa Leticia, mucho me rogaron para que lo fuera de sus nupcias, conocedores de que por mis venas corre la sangre azul del Conde Peraza, ex señor feudal de la isla La Gomera, en Canarias, y la del marqués de Linares, ex dueño del Palacio de Linares, edificio ubicado en lo más céntrico de la ciudad madrileña.

La aristocrática invitación no la acepté, porque los trescientos dólares no me hubieran alcanzado ni para comprarme un botón del frac que debían portar los invitados a ese tan renombrado, televisado y loado casamiento.

No obstante, el parco y conspicuo capo de la mafia del film El Padrino, y el que esto escribe, tenemos que vivir muy orgullosos de haber nacido en la ciudad a la que llegara el tren, procedente de La Habana, el 19 de noviembre de 1837, primero que a la misma Madre Patria, España, y a Portugal, Grecia y otros países de Europa. En este revolucionario medio de transporte y carga, Bejucal se adelantó a los continentes africano y asiático, China y Japón incluidos, así como a Australia y a Centro y Sur América y el Caribe.

Lo hizo sólo cinco años después de haber sido inauguradas las primeras vías férreas públicas para el transporte de pasajeros y carga, que operaban exclusivamente con locomotora de vapor, es decir, sin tracción animal, la de Liverpool-Manchester en Inglaterra, y la de Charleston, Carolina del Sur, en Estados Unidos.

El hijo de Vito Corleone y Margara King (madre Corleone) y el vástago de mi madre y de mi padre, Migdalia Linares Reyes y Marcelo Peraza Valdés, podemos presumir por el orbe de ser oriundos de una de las primeras villas del planeta por donde circuló por primera vez el Caballo de Hierro, tal y como le llamaban al tren el cacique Caballo Loco y sus decimonónicos indios pieles rojas del oeste norteamericano.

Quien haya venido al mundo en Bejucal, como Andy y menda, no se asombra ni siente envidia por aquellos que viven cerca del Everest ( 8848 metros de altitud, frontera nepalesa-tibetana), del Kangchenjunga ( 8598, frontera Indo-Nepalesa), del Monte Makalu ( 8481, frontera nepalesa-Tibetana), del Annapurna ( 8078, Nepal), del Aconcagua ( 6959, Andes argentinos), el Chimborazo ( 6267, Andes del Ecuador), del Monte McKinley ( 6194, Coordillera de Alaska), del Monte Logan ( 5951, Saint Elías en Canadá), del Cotopaxi (5897, Andes ecuatorianos), del Kilimanjaro ( 5895, Cumbre de Tanzania), del Elbrús (5642, Cáucaso en Rusia), el Popocatépetl ( 5482, Altiplanicie de Méjico), del Iztaccihuatl ( 5386, Altiplanicie de Méjico), del Monte Kenia ( 5199, Kenia Central), del Ararat (5122, meseta oriental de Turquía), del Mont Blanc ( 4807, Alpes de la frontera Ítalo-franco-Suiza), del Cervino ( 4478, Alpes de la frontera Ítalo-Suiza), del Monte Rainier ( 4392, Coordillera de las Cascadas en Washington), del Monte Shasta (4317, Coordillera de las Cascadas en California), del Mauna Kea ( 4205, isla de Hawai), del Jungfrau ( 4158, Alpes suizos), del Fuji Yama ( 3776, isla de Honshú, Japón), del Teide (3718, islas Canarias, España), Mulhacén ( 3481, Sierra Nevada, España) o, incluso, tampoco siente envidia por quienes residen próximos al Pico Turquino ( 1974, Cuenca de Guantánamo, Cuba), pues Bejucal cuenta con sus inaccesibles y vírgenes Lomas del Caguazo ( 9000 centímetros de altitud, lomas que pertenecen al gran Peniplano Occidental de Cuba), cumbres que no llegaron a alcanzar ni siquiera el neozelandés Edmund Hillary (pariente, al parecer, de la actual secretaria de Estado de los E:U.A.) y el guía nepalés Tenzing Norkay, miembros de una expedición inglesa, quienes tuvieron la gloria de ser los primeros seres humanos en ascender hasta la cima del Everest el 29 de mayo de 1953.

Ellos nunca se atrevieron a enfrentarse al desafío de las elevadísimas y renombradísimas cumbres bejucaleñas. Hillary fue nombrado Sir y al jefe de la expedición, el coronel Hunt, se le nombró Barón; sin embargo, ni al padrino de El Padrino ni a mi nunca nos han dado ningún título nobiliario por haber subido, de la mano de nuestros padres, abuelos o tíos, cuando apenas teníamos tres o cuatro años de edad, las inexpugnables e inmarcesibles elevaciones del pueblo que fuera pionero en la era del ferrocarril. Esa reivindicación Andy y yo esperamos que Guillermo Cabrera Infante, desde su trono en el Olimpo literario, la eleve, haga ascender o trepar, como trepan los desmochadores cubanos a las palmas reales, a los Loros de la Cámara británica.

Tanto a Andy como a mi nos enorgullece de igual manera el haber venido al mundo en la Ciudad de las Charangas. ¿Qué son las tales charangas? ¿Acaso tienen algún parecido con los carnavales de Río de Janeiro en Brasil, los de Santiago de Cuba, los de Islas Canarias, las Fallas de Valencia o las Fiestas de San Isidro en España, el Festival Internacional de Cine de Cannes en Francia, los premios Oscar en Estados Unidos, los bembés de los santeros de Guanabacoa en La Habana o con los areítos de los extinguidos indo-cubanos? ¡Claro que no! Las charangas que vimos Andy y yo de la mano de nuestros padres, abuelos, tíos o tías, son unas festividades fuera de serie, sui géneris, únicas en el planeta tierra.

Consisten en dos carrozas, la del bando azul y la del bando rojo, que la primera noche de dichas fiestas salen cada una por un extremo de la ciudad, compitiendo entre sí en ornamentación, originalidad, colorido, música y en la destreza en el baile y belleza de sus correspondientes mujeres danzarinas.

Las dos carrozas son seguidas, al compás de sus congas, por miles de sus respectivos simpatizantes, que arrollan bailando por las calles bejucaleñas mientras avanzan hacia el parque.

Una vez que arriban a ese lugar, las orquestas que acompañan a una y otra pieza lanzan al aire sus enloquecedoras notas musicales. Surgen fuegos artificiales. Los tambores, trompetas, guayos, clarinetes, timbales, maracas, bajos, claves y hasta alguna que otra lata y las voces de los cantantes atronan sin cesar. El público se mueve con frenesí. Las mujeres, poseídas a la vez por Apolo, el Dios de la música y por los orishas del culto yoruba cubano, extasiadas, delirantes, mueven a quinientas revoluciones por minuto sus sensuales, rítmicas y eróticas caderas. Los hombres las cortejan con sus provocativos bailes.

Al cabo de un par de horas, cuando más caldeados están los ánimos de los fanáticos de los dos bandos, unos quizás cantando: “Estaba la langosta en su salsa, mamá. Estaba tan salá ¡y me la tuve que jamá!”; y los otros: “Debajo de la cama está el majá. ¡Cuidao que te pica y que se va!”, de una y otra carroza comienzan a salir las esperadas “sorpresas”, que constituyen el paroxismo de la festividad: del interior de uno y otro carruaje, en medio de la noche iluminada de mil colores por los fuegos artificiales y los voladores, frente a la iglesia del pueblo, se van elevando hacia el cielo plataformas en las que aparecen, bailando a descoyuntarse, divas envueltas en humo y pirotecnia, rodeadas de adornos y alegorías de diferentes diseños.

Entonces es cuando se arma una verdadera locura entre el gentío y los gritos e instrumentos musicales incitan a los partidarios de uno y otro grupo a bailar y cantar, aún con más fervor, y a pedir que sea su carroza la ganadora de esas charangas, festividad que sólo tiene lugar una vez por año.

Seguro estoy que los recuerdos de Andy de las charangas de Bejucal mucho influyeron en la negativa de Don Vito Corleone a la solicitud que le hicieron las bandas mafiosas del Nueva York de las décadas del 40 y del 50, para que les permitiera vender drogas en su territorio. Su hijo lo convenció de que para divertirse no hacen falta las drogas.

- Y la prueba la tienes en La Ciudad de las Charangas - le dijo Andy a Don Vito.

Después de su triunfal ascensión a las Lomas del Caguazo, Andy partió rumbo a Estados Unidos. No es extraño que quien a tan corta edad haya logrado la hazana no alcanzada ni por Hillary ni por Norkay, con el tiempo llegara a cosechar los extraordinarios éxitos que avalan su trayectoria cinematográfica. Él ha conquistado las cumbres de Hollywood. Con sus películas, su extraordinaria calidad como actor y sus bien ganados millones de dólares, él está en el estrellato de los famosos del celuloide.

A idéntica edad a mi me tocó ir a parar al Güiro Boñigal, caserío del municipio de Quivicán donde vivían, en una pequeña finca, mis abuelos maternos, Natividad Reyes, de carácter jaranero y siempre sonriente y Manuel Linares, y dos de sus hijos, Reno y Neno.

Vivíamos en un bohío de techo de guano y piso de tierra. Mis tíos y yo dormíamos en hamacas hechas con sacos de yute, de los que se usaban en los centrales azucareros para envasar el azúcar prieta. Ellos le tenían pánico a las ranas. Estos batracios se escondían entre los horcones, las vigas, los cujes y las yaguas de madera que sostenían la choza y, todas las noches, antes de acostarnos, me levantaban en vilo para que yo atrapara las ranas y las tirara fuera de la casa.

Es decir, que en los mismos momentos en que Andy daba sus primeros pasos como actor, yo los daba como tira-ranas. En eso no me cabe la más mínima duda de que lo supero con creces y estoy dispuesto a ir a Hollywood, si alguien lo duda, para demostrarlo.

La diferencia es que mientras él subía al estrellato sin ayuda de nadie, a mi me subían a la cima de los horcones, las vigas, los cujes y las yaguas del bohío, rozando con mi cabeza las pencas de guano de palma real que servían de techo a nuestra morada, sin moros ni moras, pues éstos y éstas vivían en Quivicán procedentes de Libia, el Líbano, Siria y otros países árabes.

En honor a la verdad histórica, el Güiro Boñigal nunca tuvo la positiva afluencia migratoria que hoy tienen España, Alemania, Francia, Inglaterra, Italia, Suecia, Suiza, Canadá, Australia o Estados Unidos y que, en sus buenos tiempos a. de C. (antes de Castro), tuviera Quivicán.

En los Estados Unidos, Andy, desde su llegada, tuvo la oportunidad de montar distintos automóviles marca Ford, Crysler, Plymouth y quien sabe si algún Mercedes Benz. Hoy en día dispone de los mejores coches del mundo para su uso particular y el de su familia. Manuel, mi abuelo, tenía una yunta de bueyes. Los días en que le pasaba la grada a algún terreno preparándolo para una próxima siembra, me llevaba con él y me sentaba encima de la grada y, a veces, me daba las guías para que fuese yo quien condujera a la pareja de bueyes.

En eso también estoy muy por encima del colosal actor.

Andy nunca ha sentido el placer de viajar por un terreno en preparación, al mando de Granodeoro y Tumbasiete, por ejemplo, tirando de la guía derecha para que Granodeoro se inclinara en su andar hacia ese lado, o de la izquierda para que Tumbasiete hiciera lo mismo del lado suyo, ordenándoles que se detuvieran.

Conducir un automóvil por las calles de Miami, Washington, Chicago, California, Texas, Baltimore o New York, es muy fácil si se conocen a la perfección las leyes del tránsito, que son universales; pero guiar a una yunta de bueyes, sentado encima de una grada a la edad de tres o cuatro años, por una tierra de altos y bajos, piedras, huecos, hierbas y gallinas y gallos que se crucen al paso, es algo que necesita de arte, de don de mando, de saber conducir a dos bestias que marchan enyugados, pero que a cada momento hay que estarles llamando la atención, regañándoles por sus respectivos nombres y exigiéndoles que caminen por donde deben, no por donde a ellos les venga en gana, que es lo que en todo momento tienden a hacer.

No sé si peco de optimista, más creo que hay una enorme diferencia entre Granodeoro y Tumbasiete, por una parte, y un Ford y un Mercedes Benz, por la otra.

Si Andy y yo conversáramos un día, la conversación sería la siguiente:

Andy: - Hola güiroboñigalero

Yo: - Hola caguazalero.

Andy: - Un momento que tú también eres caguazalero.

Yo: - A mucha honra.

Andy: - A mucha honra yo también que los corleones defendemos a muerte nuestras raíces.

Yo: - En ese sentido los peraciones no somos menos que ustedes.

Andy: - A ver si es verdad. ¿Cuántos muertos tienes tú?

Yo: - Bueno, según El Chino tengo como doscientos.

Andy: - ¿Quién es ese chino que no se le conoce ni en la mafia de Chicago ni en la de Brooklin?

Yo: - El Chino es un espiritista de San Antonio de las Vegas.

Andy: - ¿De las Vegas, dices? Allí los corleones conocemos hasta al gato.

Yo: - No, yo te digo de San Antonio de las Vegas, un pequeño pueblucho que hay cerca de Guara, Batabanó y Quivicán.

Andy: - ¿Quieres cumplir una misión y, si lo haces, pasar a ser un miembro más de mi prestigiosa familia?

Yo: - Si no es muy difícil.

Andy: - Es muy sencilla. Se trata de que mandes al otro mundo al marido de mi hermana. Ya me tiene hasta los huevos con eso de estar dándole golpes a la pobre muchacha que, entre nosotros, te lo digo en confianza, es una mazoquista de primera.

Yo: - ¿Al otro mundo dices?

Andy: - Exacto.

Yo: - Pues me es absolutamente imposible.

Andy: - ¿Por qué? ¿Estás apendejao?

Yo: - No, no es eso. Es que ahora vivo en España y aquí sólo hay un mundo y no lo puedo mandar a otro.

Andy: -¿Qué quieres decirme con eso?

Yo: - Pues asere que en España El Mundo es un periódico, pero ningún otro diario se llama así. Los demás se nombran El País, La Razón, El ABC, La Vanguardia y muchos más.

Andy: - No me has comprendido. Lo que te encomiendo es que le des guiso.

Yo: - ¡Ojalá supiera yo hacer guiso!

Andy: - ¿Acaso no me expresaste que según El Chino tienes doscientos muertos? ¿Qué te da uno más?

Yo: - Imagínate lo feliz que viviera en España si conociera cómo se hace un guiso. Tampoco sé hacer ajiaco ni congrí ni frijóles negros ni ropa vieja ni sopa de pollo ni boniatillo ni dulce de coco. Como cocinero soy un desastre. ¿Comprendes? ¡Cuánto daría porque en Madrid vendieran guarapo, tamales y tortillas de maíz dulces o saladas! ¡Y cuánto porque aquí hubieran aguacates, mameyes, guayabas, guanábanas, marañones, mangos filipinos, mangas amarillas y blancas, mangos criollos, caimitos, canisteles, plátanos manzanos, malangas y maíz cubano!

Andy: -Oye güiroboñigalero lo que necesito es que afeites a ese tipo, que le pases la navaja y ¡Zas!

Yo: - ¿Qué lo afeite? ¿Qué le pase la navaja? A mi, cuando niño, en Quivicán me pelaban, al rape, Alfredo “El Sordo”, Sergio, Secundino, Güigüara o Chicho el barbero. Yo nunca he sido fígaro, y ahora, en España, quien me peló una vez fue El Barbero de Sevilla el día que asistí a Las Bodas de Fígaro, invitado por Pierre Agustín de Beaumarchais. Además, soy lampiño y nunca he tenido que afeitarme.

Andy: - Bueno, piensa lo que te he ofrecido y si estás dispuesto a ejecutar la tarea que te he encomendado, ven que te daré una cuarenticinco para que rompas a ese hijoeputa.

Yo: - Si la cosa es de romper, mejor encárgame, por ejemplo, que rompa un vaso de cristal. Eso sí que sé hacerlo perfectamente. Que no te quepa dudas.

Andy: - ¿Cómo lo harías? ¿Lo dejarías caer desde el piso 102 del Empire State Building de Nueva York?

Yo: ¿Desde tan alto para qué? Lo único que tengo que hacer, para romperlo, es cogerlo en mis manos y dejar que caiga al suelo, y punto. Se hará mil pedazos.

Andy: - Bueno, cómo y donde lo hagas es asunto tuyo. Así que ¡manos a la obra! No olvides que si cumples bien tu cometido, sin dejar huellas ni rastro alguno, pronto entrarás a formar parte de la architemida y todopoderosa familia Corleone. Se lo diré a Michael y a Sonny.

Yo: - Dalo por hecho. Con permiso, me regreso al Güiro Boñigal.

Andy: - Yo, a Hollywood.

Yo: - Con su venia, padrino. Me marcho.

Andy: - No te anticipes, que aún no has entrado en nuestra mafia. ¡Vivan los corleones!

Yo: - ¡Vivan los peraciones y los linariones!

Andy: - ¡Adios guiroboñigalero!

Yo: -¡Adios caguazalero!

La conversación terminaría, Andy subiéndose a su Mercedes Benz, y yo entrando al metro de Madrid, ciudad en la que hace doce años me encuentro exiliado, para viajar en el tiempo hacia el Güiro Boñigal.

Llego de madrugada a la casa de mis abuelos y me encuentro a mis tíos, Reno y Neno, sentados fuera del bohío. Llevaban décadas (desde a. de C.) esperándome para que les atrapara y expulsara de la casa a tres o cuatro ranas que, desde mi partida para encontrarme con Andy, no los dejaban acostarse en las hamacas. Abuela Natividad, como siempre, reía. Abuelo Manuel, fatigado por el duro bregar con Granodeoro y Tumbasiete, dormía a pierna suelta.

Debo dejar constancia que en mi camino de regreso me encontré con Hillary (no con la mujer de Clinton) y Norkay, quienes me aseguraron que sus espíritus están entrenándose día y noche, en el Más Allá, para un día de estos bajar al Más Acá y cumplir el reto que les quedó pendiente en la Tierra: la conquista de Las Lomas del Caguazo,

“Y de paso - me dijo Norkay – disfrutar, a. de C., de las charangas de Bejucal, y de sus quinientas revoluciones por minuto…”.

domingo, 19 de abril de 2009

SATIRA

EL SAQUE OBAMA Y EL BLA BLA BLA

Por: Héctor Peraza Linares
Madrid, domingo 19 de abril de 2009



Suena el silbato del juez.

Acaba de comenzar el juego entre Obama y Castro.

La cancha trasciende las fronteras de Estados Unidos y de Cuba, y se extiende por el mundo entero. Miles de millones de espectadores están pendientes de este histórico y trascendental encuentro.

En el juego de tenis de campo, los saques o servicios fundamentales son los siguientes: el de arriba, el de abajo, el de gancho y el lateral. Desde hace unos días este deporte conoce un nuevo servicio: el “Saque Obama”.

Como es sabido, el saque da inicio al juego ofensivo. Por lo tanto, Fidel Castro está a la defensiva. Obama le ha robado la iniciativa al vetusto dictador cubano que, a lo largo de los últimos cincuenta años, ha utilizado, por ejemplo, el “Saque Camarioca”, el del “Mariel”, el de “Guantánamo”, y el “Saque Bombo” (para el que se lo saque).

Si el pitecantrópico gobernante no reacciona como el mundo espera que lo haga, llevando a cabo la devolución que reclama la historia, el sentido común y las reglas del buen juego político, Obama se anotará un punto ante la opinión pública internacional, y de cara a los pueblos cubano y americano. En tal caso el decrépito tirano quedará descaretado y desraquetado.

Si el juego se desarrollara como es debido, a la iniciativa del presidente americano de liberar los viajes de los cubano-americanos a la isla, así como las remesas que estos puedan llevar a sus familiares, el riflexionero ex comandante en jefe debiera, por ejemplo, liberar a todos los presos políticos y declarar ante el mundo que, de ahora en adelante, en Cuba se respetarán cabalmente los Derechos Humanos.

La anterior sería una contundente devolución de Castro al brillante y potente saque, de alta velocidad y precisión, de Obama. Pero eso no va a suceder.

No nos hagamos ilusiones, aunque seamos admiradores y seguidores, casi fanáticos, de la libertad.

Pudiera ser, incluso, y Dios quiera que así sea, que Castro libere a los presos políticos. Pero, unos meses después, a las cárceles irán a parar otros opositores o periodistas, abogados, sindicalistas, economistas, maestros, obreros, campesinos, intelectuales, artistas, sociólogos y blogueros independientes.

Hasta el día de hoy, domingo 19 de abril del 2009, a las cuatro de la madrugada, hora de España, el juego lo va perdiendo, uno a cero, el cincuentenario tiranosaurio de la descuarejingada, marañera, pelimpimplética y tramposa raqueta de cuerdas demagógicas, mentirosas y megalómanas.

Durante medio siglo el saque siempre le había correspondido a Fidel Castro. Esta es la primera vez que un presidente americano, de los once que ha conocido el dictador desde que se subió al poder en 1959, le ha tomado la delantera.

La gran pregunta que se hace la humanidad en estos momentos es ésta: ¿Cómo responderá Castro al novedoso“Saque Obama”?

Castro lo responderá con un raquetazo tipo “bla bla bla”…

jueves, 16 de abril de 2009

SATIRA

LOS BURLADORES BURLADOS

“Dijo la zorra al busto, después de olerlo:
Como éste hay muchos, que aunque parecen
hombres, sólo son bustos”
Félix María de Samaniego
(Fábulas en verso castellano)

Por: Héctor Peraza Linares

(descendiente literario de Tirso de Molina)




Carlos Lage, Felipe Pérez Roque, y un amigo de ambos llamado Conrado Hernández, juegan una partida de dominó en el patio de la finca de éste último, en Matanzas. Tres botellas de ron están sobre la mesa. Entre ellos se desarrolla, en medio de tragos, risotadas y carcajadas, la conversación siguiente:

Roque – Raúl ha ordenado construir una caja de muerto, para Fidel, de veinte metros de largo. ¿Saben por qué? Voy a salir por el doble cuatro. ¡Qué rico está este ron!

Lage – Yo no lo sé. Cuatro uno. ¡Sabroso que está el roncito!

Conrado Hernández – Yo tampoco. Uno cinco.

Pérez Roque – Para ver si se decide a estirar la pata… cinco dos.

Salen estruendosas carcajadas de sus tres gargantas.

Lage – Dice radio bemba que a Fidel no lo ha vuelto loco la enfermedad que padece. Me doblo en el dos.

Roque - ¿No? Dos seis.

Conrado Hernández - ¿No? Seis cinco.

Lage – No. Dice radio bemba que a Fidel lo ha vuelto loco Raúl desde que está de
presidente. Cinco tres.

Roque – Ven acá, Lage, entonces, ¿quién ha vuelto loco a Raúl? Tres cuatro.

Lage – A Raúl lo ha vuelto loco Fidel desde que está enfermo… Cuatro nueve.

Conrado Hernández - ¿Es decir que los dos están locos? Nueve dos.

Lage – Asi mismo es. Están locos de atar. No llevo.

Roque – Más bien están locos de colgar… dos siete.

Salen estruendosas carcajadas de sus tres gargantas. El trío se da nuevos tragos de ron.

Roque – Les voy a hacer una adivinanza. ¿Quién fue primero, el huevo o Fidel? Siete ocho.

Lage – El huevo. Ocho cuatro.

Roque – No. Fue Fidel, porque primero vino Fidel y después el huevo, que ha sido el alimento básico del pueblo cubano en estos cincuenta años. Cuatro cinco.

Carcajadas a tres bandas. Más buches de ron.

Lage – ¿Qué hubiera gritado Rodrigo de Triana, desde la carabela La Pinta, si el 12 de octubre de 1492, a las dos de la madrugada, al avistar la isla de guanahaní, hubiese visto a Fidel? Cinco uno.

Roque – No se me ocurre lo que hubiera gritado. Uno nueve

Conrado Hernández – Ni a mi tampoco. Nueve seis.

Lage – ¡Loco a la vistaaaaaaaaaaa! Seis ocho.

De tanto reír dan palmadas sobre la mesa y las fichas de dominó vuelan por los aires.

Lage - ¡Se trancó el dominó! Ocho cinco.

Roque - ¡Dale agua! Cinco uno.

Conrado – ¡Ustedes son unos bota gordas! Uno blanco.

Lage – No hagan trampas, señores. Blanco seis.

Roque - ¡Jueguen limpio! Seis nueve.

Conrado – Nueve dos..

Lage – ¡Me pego!

Roque - ¡Aquí hay trampa!

Los tres amigos, después de terminar de beberse las botellas de ron, caen al piso uno tras otro. Al despertar de la tremenda borrachera, descubren, aterrorizados, que se encuentran en el interior de un calabozo de la Seguridad del Estado. Un guardia, a través de las rejas, les entrega un papel, firmado por Fidel y Raúl, que trae escrito, bajo el membrete del periódico The New York Times, lo siguiente:

¡LOS QUE RÍEN ÚLTIMO, RÍEN MEJOR!

sábado, 4 de abril de 2009

SATIRA

CHISTES CASTRÓLUCUS (IV)
Por: Héctor Peraza Linares

FIDEL EN EL JUICIO FINAL

El ángel del Señor ha hecho tocar la trompeta del Juicio Final. Todos los resucitados abandonan sus sepulcros y se encaminan hacia una inmensa explanada para asistir a la última vista pública. Sólo Fidel no abandona su sepulcro. Raúl va a buscarlo y a decirle que se apure. Raúl llama a la puerta:

- Vamos, Fidel, apúrate que llegamos tarde.

- ¡Yo no voy! – contesta el ex presidente de los Consejos de Estado y de Ministros.

- ¡Qué es el Juicio Final!

- ¡No me importa! ¡No salgo!

- Pero, ¿por qué Fidel?

- Porque, después de haber dejado a Cuba destruida como la dejé, en cuanto salga del sepulcro me matan.

FIDEL QUIERE ENTRAR AL CIELO

Fidel llega al Cielo. Dialoga con San Pedro:

Fidel: - Quiero entrar en el Cielo.

San Pedro: -¿Quién eres tú para pretender tal cosa?

Fidel: -Fidel Castro.

San Pedro consulta su libro.

San Pedro: -¿Fidel Castro? ¿El que durante casi cincuenta años fue jefe de Estado y de Gobierno en Cuba?

Fidel mueve afirmativamente la cabeza.

San Pedro: -¿El que tenía 140 viviendas de lujo en la isla de Cuba para su uso y disfrute personal?

Fidel: -¡Exacto!

San Pedro: -¿El que cuando cazaba en los cayos del archipiélago cubano, los aviones cazas se dedicaban a espantarle los pájaros?

Fidel: -Así mismo es, digo era.

San Pedro: -¿El que se hizo dueño de la isla de Cuba, de sus habitantes, tierras, animales, fábricas, palacios y de toda la riqueza que tenía, en 1959, esa tierra, cuando aquello, maravillosa?

Asentimiento de Fidel.

San Pedro: -¿El que durante su larga enfermedad tuvo a su servicio a los mejores médicos, y las mejores medicinas del mundo, mientras el pueblo cubano no tenía ni aspirinas para quitarse un dolor de cabeza?

Fidel: -Ha dado usted en el blanco.

San Pedro se rasca la cabeza, muy pensativo, y le dice a Fidel:

San Pedro: -¿Y quieres entrar en el Cielo?

Fidel: -Pues sí…, quiero entrar en el Cielo.

San Pedro: -Bueno, si tienes tanto interés en entrar, entra; pero, te advierto que, después de vivir como has vivido, esto te va a parecer el infierno…

OTORGARÁN PREMIO NOBEL DE LA PAZ A FIDEL CASTRO

A propósito de las gestiones del Buró Político del Partido Comunista de Cuba con vistas a obtener el Nobel de la Paz para Fidel Castro:

- En Suecia, señor Castro –le dice el enviado del gobierno sueco – estamos decididos, a petición del Buró Político del Partido Comunista de Cuba, a concederle a usted el Nobel de la Paz.

- ¿Por mis méritos? – le pregunta Fidel.

- No. Por si eso lo decide a dejar de dar guerra a todo el mundo con sus riflexiones.

NI LOS TIBURONES SE LO TRAGAN

Una unidad de soldados y oficiales de las Tropas Guarda-Fronteras llevan a cabo unas maniobras en alta mar. Se va a realizar una serie de ejercicios, entre ellos, el de lanzarse al agua toda la tropa. Pero comienzan a verse las aletas aterradoras de cientos de tiburones.

- ¡Al agua! – ordena el oficial que está al mando. Nadie obedece..

- ¡Cuando la Patria exige saltar al mar –grita el oficial – hay que cumplir la orden a ciegas, sin importar si hay unos cientos o unos miles de tiburones de más o de menos.

La orden sigue sin cumplirse. El oficial decide predicar con el ejemplo. Coge un salvavidas, escribe algo en él, y se lanza de cabeza a las olas. Nada un rato. Los tiburones se le acercan. Parece que le van a devorar. Llegan a tocarle con sus narices, y después se alejan. Tras permanecer cuatro horas entre los escualos, el oficial sube a cubierta sano y salvo.

- ¿Ven cómo no hay nada que temer? – le dice a la tropa.

Los jóvenes no salen de su asombro. Uno de ellos le pregunta al oficial:

- ¿Cómo ha conseguido que no le hicieran daño?

- Muy sencillo – el oficial les muestra su salvavidas. He escrito aquí: “FIDEL NUNCA HA DICHO UNA MENTIRA”, y eso no se lo tragan ni los tiburones…

EL RIVAL DE FIDEL CASTRO

Fidel, conocedor de que en Cuba se cuentan miles de cuentos acerca de su persona, siente la irresistible tentación de conocer al que los crea. Ordena que se localice a esa persona.

El G-2 prende al autor de los chistes, y el Ministro del Interior da la noticia al máximo líder. Fidel ordena que dicho individuo comparezca ante él. Una hora después recibe, en el cuarto del hospital donde lleva casi dos años ingresado, al chistoso autor.

- ¿Es usted el autor de los chistes sobre mi persona?

- Es cierto… - responde el hombre en un temblor de voz.

- Pero, ¿De todos? – le inquiere Fidel.

- No. ¡De todos, no! El que dice “La Historia me Absolverá”, ése, no fui yo quién lo inventó… ¡Se lo juro por mi madre!

BREVE RIFLEXIÓN DE FIDEL CASTRO

- En esta breve riflexión, voy a rebelar un gran secreto. El secreto es el siguiente: A la llegada de la revolución al poder, nuestro país estaba al borde del abismo. Lo que yo hice fue darle un empujón…

EL PISOTÓN DE RAÚL

Vladimir Chuchovski, mariscal ruso, llega a Cuba en visita oficial. Raúl Castro lo recibe en el aeropuerto internacional José Martí. Tropas del ejército ruso y del cubano rinden honores. Los dos mandatarios asisten, desde el podio, a la interpretación de los himnos de sus respectivos países, y, a continuación, revisan las tropas.

Chuchovski quiere hacer una demostración que impresione a Raúl. Se llega hasta donde se encuentra uno de los toscos jovenzuelos rusos, que presenta armas, y le descarga un tremendo puñetazo en la nariz. El soldado asimila el golpe sin mover ni un músculo de su cuerpo, y sin decir ni esta boca es mía, y sigue en posición marcial. El mariscal se gira hacia Raúl Castro con orgullo, y le dice:

- Así son mis hombres, General: duros, fuertes. recios y disciplinados. Le golpeo con todas mis fuerzas, y ni se inmuta.

Raúl se encuentra atrapado. Tiene que dar un golpe de efecto si no quiere hacer un ridículo. Se dirige hacia uno de los soldados cubanos. Le mira fijamente y le descarga un pisotón espectacular sobre una de las botas. El soldado cubano permanece firme sin que se le altere un músculo.

- Ve usted, mariscal – le dice Raúl al oficial ruso – Los cubanos son más delgados, están
peor alimentados, pero, a la hora de demostrar entereza y espíritu castrense, están a la altura de sus soldados.

El mariscal se ha quedado anonadado. Raúl, aunque lo disimule, también se siente sorprendido. Es por eso que, en un aparte, habla con el soldado en voz baja.

- Lo felicito, soldado. No obstante, dígame ¿cómo ha podido soportar, sin hacer el más mínimo gesto de dolor, el tremendo pisotón que le he dado?

El soldado le responde:

- Mi General, es que yo calzo un 37, y en la unidad me han dado botas del 58.

SAN PEDRO VISITA A FIDEL

San Pedro se le aparece a Fidel, en la habitación donde éste convalece de su prolongada y grave enfermedad. Entre los dos se establece el diálogo siguiente:

- ¿Quién es usted? – pregunta Fidel a San Pedro.

- Soy San Pedro.

- ¿Y por qué ha venido a verme?

- Es que vengo a dejarle las llaves, para que suba usted cuando le dé la gana…

LOS CUBANOS PUEDEN GRITAR: ¡ABAJO RAÚL Y FIDEL CASTRO! Y NO PASA NADA

Un americano visita a Cuba y establece una conversación con un cubano.

-Ustedes no tienen libertad – le dice el americano al cubano.

- ¿Y qué libertad tienen ustedes en Estados Unidos? – pregunta el isleño.

- Mire – le explica el súbdito del país más poderoso del mundo – si a nosotros nos cae mal nuestro presidente, podemos plantarnos a la entrada de La Casa Blanca y gritar: ¡Abajo Bush! y no pasa nada.

El cubano lanza una cacajada.

- ¿De eso se enorgullecen ustedes? Los cubanos podemos hacer lo mismo.

- ¿Si? – le pregunta, incrédulo, el yanqui.

- ¡Claro que sí! Cualquier cubano puede plantarse a la entrada de La Casa Blanca y gritar: ¡Abajo Raúl y Fidel Castro! y no pasa nada…

CASTRO MEDITA DECLARAR LA GUERRA A ESTADOS UNIDOS

Corre el año 1990. La situación económica de Cuba es muy mala. Fidel está muy preocupado. Convoca al Consejo de Ministros. Pide a los reunidos que le manifiesten planes, soluciones, ideas. Nadie habla. Al fin, uno de los ministros propone:

- Creo, comandante, que nuestra única salida es declarar la guerra a Estados Unidos.

- ¿La guerra a Estados Unidos? –pregunta Castro, con el ceño fruncido.

- Sí, comandante. Ya conoce usted lo que pasa en las guerras contra Norteamérica: primero se lucha, luego ellos vencen, llegan con sus planes de reconstrucción, lo inundan todo de dólares, y los vencidos se convierten en un país boyante.

Castro se sume en profunda meditación, y dice:

- No está mal…, no está mal…declaro la guerra a los Estados Unidos…

Fidel hace una pausa y, clavando sus ojos en los del ministro autor de la proposición, le pregunta:

- Pero, ¿y si les gano la guerra?

lunes, 30 de marzo de 2009

LAS LEYES DE HÉCTOR
SOBRE EL CASTRISMO (V)

Autor: Héctor Peraza Linares
Periodista, escritor humorista,
ex preso político cubano exiliado en España.
http:www.hectorperaza.blogspot.com

hector.peraza.linares@hotmail.com
Madrid 30 de marzo de 2009


LA LEY DE LA PROBLEMÁTICA CASTRISTA

No. 71- Las soluciones que en el pasado daba Fidel a los problemas, y las que ahora da Raúl, entrañan, invariablemente, nuevos y más graves problemas.

COROLARIOS:

1- Antes, Fidel era el problema mayor y Raúl el problema menor. Ahora, Fidel es el mayor problema de Raúl.
2- El mayor de los problemas cubanos tiene un nombre, sólo tiene un nombre: el binomio Castro Ruz.
3- El problema principal de la Revolución lo define una frase de Fidel Castro que, traducida al lenguaje de la calle, es la siguiente: Dentro de la revolución, todo es permitido. Contra la revolución, todo es condenado.
4- Sin Fidel no hubiese habido Raúl. Sin Raúl no habría ahora Fidel.
5- Casi siempre es menos problemático entrar que salir de Cuba.
6- En la filosofía de las leyes de Héctor, problema es una categoría dividida, y unida, en dos partes: Raúl y Fidel.
7- En la revolución los problemas siempre traen colas…
8- Los peores problemas de Raúl, son las soluciones que les da Fidel.
9- Fidel tiene un gran problema. Raúl, dos. Cuba, tres: Fidel, Raúl, y los dos juntos.

OBSERVACIÓN DE CHICHO AL SEGUNDO COROLARIO

No. 72- Fidel es el padre de los problemas cubanos. Raúl, el padrastro.

PARADOJA DE VIZCAÍNO

No. 73- Raúl, como tiene los ojos achinados, si algún día llega a mirar hacia Estados Unidos, en realidad estará mirando hacia China.

DILEMA DE HÉCTOR SOBRE EL PENSAMIENTO EN CUBA

No. 74- La ideología castrista premia a quien aplaude lo contrario de lo que piensa.

COROLARIOS:
1- Al igual que las monedas, en Cuba la gente tiene dos caras: la revolucionaria, de uso público, y la contrarrevolucionaria, de uso privado.
2- Fidel y Raúl tienen el criterio de que repitiendo mil veces una mentira, ellos mismos acaban creyendo que es verdad.
3- Los disidentes no piensan como el gobierno; luego, actúan; por lo tanto, existen.
4- Entre otros animales, los perros del gobierno no piensan.

OBSERVACIÓN DE MATÍAS PÉREZ A LOS ANTERIORES COROLARIOS

No. 75- En Cuba nadie piensa lo que dice públicamente que piensa, siempre que diga que piensa como piensa el gobierno.

LEY DEL ERROR SISTEMÁTICO

No. 76- Errare castristum est.

AXIOMA DE CHEO MALANGA

No. 77- Las pocas medidas que benefician a la población, el gobierno castrista las llama permanentes, y en realidad son temporales.

APUNTE DE CASIMIRO AL AXIOMA DE CHEO MALANGA

No. 78- Las muchas medidas que perjudican a la población, el gobierno castrista las llama temporales, y en realidad son permanentes.

MÁXIMA DE PUNTA A PUNTA


No. 79- Como en Cuba el Estado es el único dueño de los medios de producción, las iniciativas en materia económica se llevan a cabo, al unísono, en todo el país. Es el estilo que tiene el gobierno castrista de generalizar las catástrofes.

COROLARIO:

1- Las tierras que el gobierno ordena desbrozar para sembrar caña, café o para la ganadería, terminan siempre convertidas en marabuzales.
2- El castrismo ha convertido a la planta llamada marabú en el símbolo más activo e ilustrativo del socialismo: hay que arrancarla de raíz, y a continuación quemarla, para hacerla desaparecer de la isla.

PRINCIPIO DE MOSKOVICH

No. 80- Cuba es un país donde la burocracia gobernante, si se siente débil, para fortalecerse se combate a sí misma.

COROLARIO:


1- Cuando la burocracia raulista termine de organizarse para “incrementar la productividad y la eficiencia”, se habrá convertido en otra distinta a la burocracia fidelista, y, a la vez, en la misma.
2- La inabarcable burocracia castrista es directamente proporcional al hambre de los cubanos.





martes, 24 de marzo de 2009

SATIRA

CHISTES CASTRÓLUCUS DE PEPITO (III) Héctor Peraza Linares
Periodista, escritor humorista,
ex preso político cubano exiliado en España.

Madrid, 25 de marzo de 2009



LA JICOTEA Y FIDEL

Pepito le dice a la maestra:
- Maestra, maestra, mi papi y mi mami se han ido de vacaciones una semana para la playa y no me dejaron comida para la jicotea.
La maestra le responde:
- Pepito, no te preocupes por eso que las jicoteas pueden estar más de seis meses sin comer, y tus padres regresarán dentro de una semana.
Pepito, con cara de susto, se lleva el dedo índice a la boca y le dice:
- Ssssssssssssssss, maestra, maestra, sssssssssssssss, hable bajito, se lo ruego, que si Raúl y Fidel se enteran de lo que usted me ha dicho de la jicotea, le ponen carapacho a todo el pueblo cubano.

PEPITO EN LA ÉPOCA DE REAGAN

La maestra cuelga un retrato del presidente Reagan y pregunta a los alumnos:
- ¿Cómo se llama la persona que aparece en este retrato?
Silencio total.
- Voy a darles una pequeña ayuda – dice la maestra a los niños. Por culpa de este individuo estamos pasando hambre en Cuba.
Pepito se levanta de su asiento y dice:
- ¡Ah, maestra! es que sin uniforme y sin barbas no lo conocía.

DISCURSO DE PEPITO EN LA REAL ACADEMIA DE LA LENGUA ESPAÑOLA

- Eminencias: contra Castro he dicho lo que he dicho, y lo que no he dicho no lo he dicho por no haberlo dicho, sino, porque, de haberlo dicho, o si lo hubiera dicho, no
hubiera podido haber dicho lo que les he dicho. Dicho esto, lo que he dicho de lo dicho es lo que he dicho, y lo que no he dicho de lo dicho es lo que no pude haber dicho, porque, de haberlo dicho, no hubiese dicho lo que he dicho, sino lo que he dicho que pude haber dicho. Lo que he dicho contra Castro, dicho está. Y lo que no he dicho contra Castro, dicho estará.
He dicho.

LA VERDADERA PROEZA

Pepito llega remando a Miami, trepado sobre una botella de Coca Cola.
Los periodistas, maravillados, le preguntan que cómo había podido llevar a cabo semejante proeza.
Pepito les responde:
- Bueno, la verdadera proeza fue encontrar en Cuba una botella de Coca Cola…

EL VERTEDERO

- ¿Qué es el capitalismo? – pregunta la maestra a Pepito.
- El capitalismo es un vertedero lleno de carros, juguetes, ropa y comida.
- Muy bien, Pepito. ¿Y qué es el comunismo?
- El mismo vertedero, pero sin carros ni juguetes ni ropa ni comida ni ná ni ná.


EL PARAÍSO PERDIDO

La maestra pregunta:
- Pepito, ¿En qué lugar estaban Adán y Eva cuando lo del Pecado Original?
- En Cuba, maestra – le responde Pepito.
- ¿Por qué crees que Adán y Eva estaban en Cuba, Pepito?
- Porque no tenían ropa que ponerse, ella no tenía blumers y él andaba sin calzoncillos, caminaban descalzos, no los dejaban comer manzanas, y les insistían que se encontraban en el paraíso…

PEPITO PARTE A FIDEL POR EL MEDIO

- ¿Qué edad tú crees que tengo? – pregunta Fidel a Pepito.
- Ochenta y dos años, comandante.
- ¡Exacto! ¡Ni uno más ni uno menos! ¿Y cómo es que conoces exactamente mi edad?
- Comandante – le responde Pepito – es que yo tengo un tío que es medio ladrón, y medio otra cosa peor, que tiene cuarenta y uno.

SI EL MAR SE SECARA

La maestra le pregunta a Pepito:
- Pepito, si sucediera que el mar que separa a Cuba de Estados Unidos se secara, ¿qué tiempo crees que necesitará una persona para recorrer, a pie, las noventa millas que separan a nuestra isla de la nación americana?
- Un par de años – le responde Pepito.
- Eso es una exageración – le responde la maestra. Sólo son noventa millas.
- Sí maestra, pero habrá que ir caminando, en medio de once millones trescientas mil personas, constantemente diciendo: permiso…por favor… déjenme avanzar… permiso… ¡No empujen, por favor!... ¡Qué pisotón me han dado!... Permiso…

DALE AL QUE NO TE DIÓ Y AL QUE TE DIÓ TAMBIÉN

La maestra le pregunta a Pepito:
- Pepito, ¿cuál es la indisoluble y patriótica relación que hace cincuenta años existe entre el gobierno revolucionario y el pueblo cubano?
- Maestra, que el gobierno hace cómo que no ve lo que roba el pueblo, y el pueblo hace como que no ve lo que roba el gobierno.

LA GRAN ESTAFA

La maestra a Pepito:
- Pepito, ¿cómo se llaman los suministros de la bodega?
- Maestra, se llaman norteamericanos.
- ¿Pepito, por qué dices que se llaman norteamericanos los alimentos que le tocan al pueblo por la libreta de abastecimiento?
- ¡Porque el gobierno siempre nos dice que vienen, pero no llegan nunca!


DIFERENCIA

La maestra:
- Pepito, ¿en qué se diferencian el infierno y el socialismo?
- Maestra, en que el primero está en el cielo, y el segundo en la tierra.

EL PAR DE BONIATOS

Le dice la maestra a Pepito:
- Pepito, ¿qué país tiene el invento más grande del mundo?
- Cuba, maestra.
- ¿Por qué dices eso, Pepito?
- Porque aquí inventaron a dos hombres, a cada uno de los cuales le colocaron un boniato en la cabeza, y llevan cincuenta años gobernando este país.

sábado, 21 de marzo de 2009

SATIRA

LAS LEYES DE HÉCTOR
SOBRE ELCASTRISMO
(IV) Autor: Héctor Peraza Linares
Periodista, escritor humorista,
ex preso político cubano exiliado en España.

Madrid, 21 de marzo de 2009


LEY DEL GÉNESIS DE LA CENSURA

No. 61: Raúl y Fidel Castro son grandes e incontestables censores de las publicaciones, y demás creaciones, de los intelectuales y artistas cubanos que viven en la isla, porque, según ambos, en el primer libro bíblico, el Génesis, aparece la primera censura histórica: la hoja de parra que Eva colocó en su artículo de fondo...

BITÁCORA SURREALISTA DE LOS PRECIOS EN CUBA

No. 62: Los precios de las mercancías en las tiendas de venta por chavitos o ceuces, en Cuba, son como los bigotes del fallecido pintor español Salvador Dalí: van siempre para arriba…

DICTAMEN DEL COMUNISMO FASHION DOLCE & GABBANA

No. 63: Después de la visita que alrededor de una decena de presidentes de América Latina han realizado, este año, a Raúl y Fidel Castro, Cuba se ha convertido, de hecho y de derecho, después de París, Milán, Madrid, Londres y Nueva York, en la sexta pasarela de la moda mundial (de otoño)…

LA LEY DE LA BALSA Y EL CATAMARÁN

No. 64: La mayor cárcel del mundo se encuentra en Cuba. El océano Atlántico por el Norte, el mar Caribe por el Sur, el Golfo de México por el Este, y el Paso de los Vientos por el Oeste constituyen los carceleros de dicha prisión.

LEY DE NO HAY MAL QUE DURE CIEN AÑOS

No. 65: El pueblo cubano lleva 50 años encarcelado… Cuba es, por lo tanto, el país donde viven los presos más antiguos del mundo.

DEFINICIÓN DE UN RÉCORD MUNDIAL

No. 66: En Cuba existe el animal más grande del mundo: la langosta, que tiene la cabeza (su parte no comestible) en el puerto pesquero de La Coloma, en Pinar del Río, y la cola (su parte comestible) en los mejores restaurantes de Europa.

INEVITABLE LA LLEGADA DEL CAMBIO CLIMÁTICO

No. 67: Cuba cuenta al año con sólo dos estaciones: verano e invierno. El otoño está en el poder, y la Primavera Negra en las cárceles desde marzo de 2003.

MILAGRO PAPAL

No. 68: El vaticano ha producido más papas, en los últimos cincuenta años, que el Ministerio de la Agricultura cubano.

LEY DEL HONGO DE LOS MOGOTES Y DE LOS COGOTES

No. 69: Cuba cuenta con la especie de moluscos más antigua del mundo: la Viana Regina o Calcifolio, que vive pegada a los mogotes y rocas para alimentarse del hongo de las mismas. En Cuba también vive el gobierno más antiguo del mundo: la Rauliana Fidelina o Castrofolio, que vive pegado al cogote del pueblo cubano para alimentarse de su sudor y de su sangre.

PRINCIPIO MECÁNICO DE LA MARCHA ATRÁS

No. 70: Cuba fue en 1958, un año antes de la llegada de los Castros al poder, el segundo país del mundo, después de Estados Unidos de Norteamérica, en transmitir emisiones de televisión en colores. Cuba es, en 2009, junto a otras dictaduras comunistas, uno de los pocos países del mundo donde los ciudadanos no tienen acceso a internet…